Siempre que voy a ver a mi Yaya , me termina preguntando si he podido localizar a su "amigo" ; ese Amigo del que tanto me habla , fue un joven de 17 años enamorado de ella , que se fue al servicio militar , pero no sin antes prometerle que se casarían. En ese periodo , mi abuela conoció a mi abuelo y se "enamoró" de él . Cuando volvió el soldado a pedir su mano , la mujer incapaz de salir a su encuentro pidió a su madre que mintiera y el chico desanimado se marchó . 23 años después mi abuelo murió , y ella , destrozada y sin marido , se quedó a cargo de 5 hijos . El día del entierro , aquel joven militar, hecho ya hombre , se acercó a mi abuela , le dio el pésame y le comunicó que él también estaba viudo . Durante un tiempo se cartearon , él le habló de amor , nunca la había olvidado ; la viuda , fiel a sus votos calló y dejó de escribir . Ha pasado más de un lustro , ya tiene 93 años , es vieja y está cansada , pero nunca se olvida de aquel mozo que durante tantos años la ha quiso . Ella amaba a mi abuelo , ha sido muy feliz con él , pero muchas veces cuando estamos a solas , me reconoce que realmente estaba enamorada de ese chico de su pueblo que se fue a la mili , que siempre la respetó y la buscó . Muchas veces se pregunta , como hubiera sido la vida con esa persona , se arrepiente de cómo le trató y más aún de no retornar su "amistad" tras la muerte de mi abuelo ; se conforma con saber de él , creer que está vivo y verse por última vez . Hoy , de vez en cuando , sigo buscando aquel nombre y aquella dirección que aún recuerda de ese pueblo viejo y abandonado que fue su hogar , con la esperanza de llevarle una vieja foto o una noticia de su fiel amado.
A veces , tiene que pasar toda una vida , para darnos cuenta de quien amamos de verdad. La vida nos pone oportunidades , para retornarlo y si no la cogemos siempre nos arrepentiremos . A VECES, EL TREN NO SÓLO PASA UNA VEZ.
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