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miércoles, 30 de noviembre de 2022

Re-encuentros...

 




Después de 5 años retorno introspectiva a encontrar mis orígenes... Y curiosamente aparece éste precioso blog que hice con todo mi cariño, rabia , inconsciencia y locura.

En éste tiempo , me he vuelto a mudar , a cambiar de puesto de trabajo , casarme  y tener una hija... Con sus altos , con sus bajos, pero siempre avanzando.

Mirando atrás me doy cuenta de muchas cosas , pero la más importante para mí ,  es, que he dejado de hacer lo que realmente me gusta para hacer " lo que tengo que hacer". Siempre con excusas : que si la niña , que si el trabajo , la oposición... Y no me daba cuenta que me tiro más tiempo mirando el móvil y eludiendo mi "consciente" compañía que disfrutando de MI compañía.

Desde que he sido madre , he querido ser la mejor versión de mí , intentar corregir los errores que mis padres cometieron conmigo y sobre todo no intentar reflejar mis sueños/frustraciones en mi hija y la conclusión de todo ha sido...ABRAZA TODAS TUS EXPERIENCIAS Y HAZ LAS PACES CON TU NIÑA INTERIOR.

Indagando , pidiendo al Universo , Dios o quien quiera que me escuchase,  soluciones,  que estaban dentro de mí , intentado tener la vía fácil que me lo contaran pero nunca integrarlas . 

Y duele , duele ver que para sanar hay que romperse , que para entender hay que escuchar y que para volar primero hay que saltar. Mirar en lo más profundo da miedo pero sino miramos no sólo cometeremos los mismos errores sino que nuestros descendientes tendrán esas losas en su camino. 

Y yo...que al convertirme en madre me creía más sabIa. Yo, que miro a mi hija cada día y veo un espejo tan claro y transparente que me da recelo ojearlo a veces. Yo , que presumía que iba a ser la más valiente , la más justa y la más fuerte, he tenido que chocarme con la realidad para ver que soy humana.

Es mi hija la que me da grandes lecciones y es gracias a ella por la que me he embarcado en un arduo viaje para convertirme en lo que veo en sus ojos. Y tengo miedo   y me entran ganas de llorar y necesito derrumbarme para poder encontrar en mí esa niña que criará a mi hija.

Es curioso que cuando aprendes a mirar a través de los ojos de un niño , te das cuenta de todas esas pequeñas cosas que te dan la vida y dejas de hacer que porque  las consideran "tonterías". escribir , escuchar tu canción preferida, bailar porque sí, pasear bajo la lluvia y por qué no,  reírte porque no te han pillado y echar la culpa a otro.

Quiero volver a ser niña pero esta vez con la madurez de una mujer  y si para eso tengo que destruir todas las capas , facetas , muros y obstáculos de mi vida ... Lo haré y no a martillazos sino con un sutil cincel que perfile mi silueta y muestre mi alma sin miedo , sin vergüenza,  dura como el mármol y sencilla como su tonalidad , pura como la piedra que se queda pulida y que perdura en el tiempo.

POR ELLA , POR MÍ , POR MI NIÑA INTERIOR