En la distancia de mi vida , en el silencio de mi rutina vuelvo a encontrarme perdida.
En el final del abismo donde no ves horizonte alguno despliego mi alas para volar
y me doy cuenta de que nunca las he usado.
Las observo , intactas ,bellas ,frágiles ...
Un escalofrío recorre mi cuerpo y una pregunta ronda mi mente ¿ Serán capaces de resistir?
Tanto tiempo para llegar al final y te das cuenta que sólo es otra etapa del camino . Desazón y alegría se funden para crear un sentimiento de desconcierto.
Todo se ve diferente desde la cima , lo grande se convierte en pequeño , lo imposible en difícil y lo difícil en posible.
Las personas caminan tan lejanas que puedes ver el ritmo de su paso y los senderos que van a coger , todos tan diferentes y algunos tan complicados... Y yo sigo ahí observando desde arriba la travesía de algunos que creo que me acompañarán en mi camino en algún momento de mi vida , y llego a la conclusión de que hay que saltar para saber a dónde tengo que regresar.
Despliego mis alas , respiro hondo , miro al horizonte una vez más , contemplo la profundidad del abismo , cierro los ojos... Y práctico un salto de fe.
Mis alas se tambalean , mi seguridad flaquea pero no dudo en batir más fuerte.
Una sensación de libertad inunda mi ser , la euforia me acompaña y las ganas de conocer me invaden ; paisajes preciosos me esperan ... Pero mi fiel pasajero " miedo" me recuerda que no es tan fácil y mis fuerzas flaquean pero algo en mí grita " FLUYE , VIVE, SIENTE , YA ES HORA DE SER TÚ . DE VIVIR EN PLENITUD"
Una nueva etapa , caras nuevas , trayectos desconocidos , gente coincidente , caídas , victorias me esperan... Pero todo ello con el corazón al descubierto , los ojos bien abiertos y la mente despierta...
NAMASTE
